jueves, 29 de junio de 2017

QUE DISTINGUÍA A LOS CRISTIANOS DEL PRIMER Y SEGUNDO SIGLO?


¿QUE DISTINGUÍA A LOS CRISTIANOS
 DEL PRIMER Y SEGUNDO SIGLO?



El siguiente fragmento hace parte de una carga llamada A Diogneto que dato del Siglo II Y un historiador habla de esa calidad de vida de nuestros primero hermanos y al final del este texto dejo el link para que descarguen la obra Completa y la lean y una canción de Marcos Vidal, que nos cae como anillo al dedo. Dios los bendiga y creemos un espacio reflexivo.



DESCARGAR CARTA A DIOGNETO COMPLETA



“En cuanto al misterio de la religión propia de los cristianos, no esperes que lo podrás comprender de hombre alguno. Los cristianos no se distinguen de los demás hombres ni por su tierra, ni por su lengua, ni por sus costumbres. En efecto, en lugar alguno establecen ciudades exclusivas suyas, ni usan lengua alguna extraña, ni viven un género de vida singular. 

La doctrina que les es propia no ha sido hallada gracias a la inteligencia y especulación de hombres curiosos, ni hacen profesión, como algunos hacen, de seguir una determinada opinión humana, sino que habitando en las ciudades griegas o bárbaras, según a cada uno le cupo en suerte, y siguiendo los usos de cada región en lo que se refiere al vestido y a la comida y a las demás cosas de la vida, se muestran viviendo un tenor de vida admirable y, por confesión de todos, extraordinario.

Habitan en sus propias patrias, pero como extranjeros; participan en todo como los ciudadanos, pero lo soportan todo como extranjeros; toda tierra extraña les es patria, y toda patria les es extraña.

Se casan como todos y engendran hijos, pero no abandonan a los nacidos. 
Ponen mesa común, pero no lecho. 
Viven en la carne, pero no viven según la carne. 
Están sobre la tierra, pero su ciudadanía es la del cielo. 
Se someten a las leyes establecidas, pero con su propia vida superan las leyes. Aman a todos, y todos los persiguen. 
Se los desconoce, y con todo se los condena. Son llevados a la muerte, y con ello reciben la vida. 
Son pobres, y enriquecen a muchos ( 2Cor 06:10). 
Les falta todo, pero les sobra todo. 
Son deshonrados, pero se glorían en la misma deshonra. 
Son calumniados, y en ello son justificados. «Se los insulta, y ellos bendicen» (1 Cor 4, 22).

Se los injuria, y ellos dan honor. 


Hacen el bien, y son castigados como malvados. 



Ante la pena de muerte, se alegran como si se les diera la vida.


Los judíos les declaran guerra como a extranjeros y los griegos les persiguen, pero 


los mismos que les odian no pueden decir los motivos de su odio”



Este es el testimonio de un Historiador  asombrado al ver la calidad de vida. No se distinguían por su ROPA o SUS RARAS COSTUMBRES, sino en la determinación para defender su amor por Cristo.